La mejor herramienta para tus finanzas es tener un presupuesto. Muy pocos lo hacen, pensando que no se necesita o que los restringe. La verdad es que el presupuesto te ayuda a alcanzar tus metas: un viaje a la playa, ahorrar para una casa, ó comprar un carro sin endeudarte.
Al planear bien donde quieres gastar tu dinero, le das un trabajo a cada centavo que tienes.
Si ganas $1,000 dólares mensuales todo lo que gastes, ahorres, inviertas, y dones debe sumar a $1,000 dólares. De esta manera sabes exactamente el propósito de cada centavo y al final del mes tus ingresos menos tus egresos suman a cero. Esto no significa que tu cuenta de banco esta en ceros, pero que todo tu dinero en el presupuesto tiene un trabajo específico.
¿Y como se hace un presupuesto?
Abre excel, escribe en una hoja, o donde tu gustes: vamos a crear tu presupuesto.
La primera parte de cualquier presupuesto son los ingresos. Estos incluye tu trabajo, pequeño negocio, intereses, y cualquier otro dinero que ganes en el mes. Si ayer no tenias el dinero y hoy lo tienes, es ingreso.
Aquí recomendamos poner tus ingresos brutos (antes de impuestos) y tener otra categoría para los impuestos. Así que después que hayas calculado tus ingresos brutos, calcula tus impuestos.
Al final, tendras algo similar a este ejemplo:
La parte más importante de tus finanzas es el ahorro. Si no tienes el ahorro como uno de tus objetivos principales, no vas a ahorrar y te endeudarás. Por eso recomendamos poner el ahorro primero, para que crees el hábito, aprendas a ahorrar, y no te endeudes.
Recomendamos ahorrar mínimo el 15% de tus ingresos. Si no puedes llegar a esta cifra, o tienes deuda que aún estás pagando, no te preocupes. Empieza ahorrando cuanto puedas y trabaja en incrementar tus ahorros.
Piensa sobre todos tus gastos y divídelos en categorías sencillas: Vivienda, Alimentos, Suscripciones, Gastos Médicos, Transporte, Seguros, etc. Crea categorías que funcionen para ti. Siempre puedes cambiarlas otro mes si ves que no te acomodan.
En cada categoría ve tus gastos de meses anteriores y determina cuánto tienes que presupuestar. Si ves tus recibos y normalmente gastas $100 en transporte al mes, presupuesta lo mismo para este mes.
Ahora, Así se debería ver tu presupuesto:
Después de listar tus gastos, verifica la cantidad de cada categoría y ve si hay oportunidad de ahorrar más. Al final, no debería haber dinero sobrante ni faltante. Tus ingresos menos ahorros y gastos deben sumar a cero.
Si tu presupuesto está negativo, hay gastos que no te alcanzan. Busca cancelar tus suscripciones, reducir tus salidas al cine o a restaurantes. Si ya reduciste los gastos y aún sigues con más gastos que ingresos necesitas incrementar tus ingresos.
El presupuesto no es algo que se hace al principio del mes y se olvida. Úsalo con frecuencia durante el mes para que vayas ajustando tus gastos y termines el mes con dinero. No toma mucho tiempo ajustarlo cada semana y tendrás tiempo para corregir gastos que no contemplaste.
Los primeros tres meses siempre son difíciles mientras te ajustas a usar un presupuesto. No te desanimes si no alcanzas tus metas o no lo sigues bien. Estás creando un hábito nuevo.